La intermediación inmobiliaria es un término que sonará sobre todo a aquellos que se hayan enfrentado a la compraventa de una vivienda, pero no es un término que se conozca a nivel general. Pero, ¿qué es? Cuando hablamos de intermediación inmobiliaria nos referimos al trabajo de agencias e intermediadores para realizar cualquier tipo de transacción inmobiliaria. 

La venta, alquiler o compra de una vivienda puede suponer una auténtica pérdida de tiempo y de dinero si no se tienen los conocimientos adecuados. Por esto, los intermediadores inmobiliarios como los agentes de GILMAR pueden ayudarte con sus años de experiencia y saber hacer para conseguir el acuerdo más beneficioso.

Definición de intermediación inmobiliaria

Tal y como hemos dicho previamente, la intermediación inmobiliaria es el servicio que ofrecen los agentes y agencias inmobiliarias en los procesos de compraventa o alquiler de inmuebles de acuerdo a unas condiciones establecidas en un contrato de intermediación inmobiliaria firmado previamente. 

Dada la complejidad del sector inmobiliario y la cantidad de procesos que deben llevarse a cabo en cualquier operación, no cabe duda que contar con un intermediario inmobiliario es la mejor opción. Por eso en GILMAR te ofrecemos nuestros años de experiencia para que tus operaciones inmobiliarias tengan el éxito garantizado. En los últimos tiempos los servicios que ofrece GILMAR se han multiplicado en consonancia con la evolución del mercado, adaptándose a las nuevas figuras, situaciones y preferencias de los clientes. La búsqueda de clientes, la selección de hipotecas, el diseño del proyecto de reforma o la ayuda legal para grandes inversiones, son solo algunos de los servicios que más demanda tienen en la actualidad en las oficinas de GILMAR. 

Tipos de intermediarios inmobiliarios

Si bien es cierto que, por norma general, encontramos a intermediarios inmobiliarios vinculados a agencias, también es posible encontrar a profesionales independientes con una amplia experiencia en el sector. Lo que tienen en común es su experiencia, generalmente en el proceso de negociación en compraventa de inmuebles. 

¿Por qué son tan importantes? Porque es precisamente esta experiencia la que permite hacer cualquier operación inmobiliaria mucho más ágil, además de garantizar al propietario el mejor acuerdo de acuerdo a sus intereses. La figura del intermediario inmobiliario está presente durante todo el proceso, incluida la gestión de toda la documentación necesaria para las operaciones. Un papel fundamental, ya que esta parte puede resultar abrumadora para el propietario y es esencial para que dicha operación se lleve a cabo de forma completamente legal.

Una de las grandes virtudes del intermediario, además de la pasión por su trabajo, es el conocimiento del mercado. Estas dos características son fundamentales para que entren a formar parte de la familia GILMAR donde nos rodeamos de los mejores profesionales. Un buen intermediario presta su ayuda y asesoramiento y sabrá detectar y anticiparse a las necesidades de los clientes.

A continuación, te hablamos de los profesionales de la intermediación inmobiliaria a los que puedes recurrir. 

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Agentes inmobiliarios

Son los más conocidos por el público general. Estos cuentan con formación especializada en el mundo inmobiliario, con una amplia visión del mismo y práctica en las operaciones que pueden realizarse. Esta formación le ofrece un punto de vista imparcial, un gran aliado para ayudarte a encontrar las viviendas más adecuadas para la inversión inmobiliaria. 

Es imprescindible que, además, tenga un gran conocimiento de la zona en la que trabaja. De esta manera puede identificar más fácilmente las oportunidades de inversión. Además, su trabajo exige una buena capacidad de escucha para entender las necesidades de los clientes con los que trabaja.

Corredores de bienes raíces

Otro de los profesionales de la intermediación inmobiliaria son los corredores de bienes raíces. Estos tienen la experiencia necesaria para ayudar a las personas en las transacciones de bienes raíces. Pueden hacer todo lo que un agente inmobiliario puede hacer, pero también asumir otras responsabilidades como administrar agentes. 

Entre las labores que solo los corredores pueden hacer se encuentran:

  • Poder realizar transacciones de dinero para impuestos y seguros de la vivienda.
  • Poder mediar en una disputa legal.
  • Poder contratar agentes inmobiliarios para que trabajen a su servicio.

Promotores inmobiliarios

En lo que respecta a los promotores inmobiliarios, estos se encargan de liderar y coordinar proyectos de construcción, desde su diseño hasta la entrega de las viviendas. Su papel es fundamental en el sector inmobiliario, ya que son los responsables de maximizar el valor del terreno.

Su figura y obligaciones están recogidas por el artículo 9 de la Ley de Ordenación de la Edificación, la Ley 38/1999 del 5 de noviembre de 1999:

  • Ostentar sobre el solar la titularidad de un derecho que le faculte para construir en él.
  • Facilitar todos los documentos e información previa para la redacción del proyecto. Asimismo, es el encargado de autorizar al director de obra las posteriores modificaciones (en caso de que fueran necesarias).
  • Gestionar y obtener las licencias y autorizaciones administrativas para la edificación, así como suscribir el acta de recepción de la obra.
  • Suscribir los seguros previstos en el artículo 19.
  • Entregar al adquirente, en su caso, la documentación de obra ejecutada, o cualquier otro documento exigido por la administración competente. Normalmente, esta documentación se trata del Libro de Edificio, que se debe facilitar al comprador y usuario final.

Gestores de propiedades

En la intermediación inmobiliaria también encontramos a los gestores, aquellas personas o empresas que brindan servicios de mediación, gestión y asesoramiento en materia inmobiliaria como, por ejemplo, para la compraventa, alquiler o cesión de inmuebles. 

Ya sea como profesional independiente como siendo parte de una agencia, su papel como asesores es fundamental para las personas ajenas al sector. Además, puede llevar a cabo tareas como fotografiar los inmuebles, elaborar los anuncios para portales online, incluir los nuevos inmuebles en los registros de una inmobiliaria, valorar las viviendas o crear su estrategia de promoción.

Funciones clave de los intermediarios inmobiliarios

Podríamos decir que todo intermediario inmobiliario tiene una tarea común, poner en contacto a los propietarios con intereses que se complementan, compra y venta. Pero lo importante es que para llevar a cabo cualquier acción a través de estos profesionales es necesario firmar un contrato de intermediación inmobiliaria. 

Este contrato debe contener los datos del comprador o vendedor, de la propiedad en cuestión, el precio a negociar, y las condiciones que se establecen para que el intermediario se encargue del proceso. Además, se establecen también los honorarios a percibir por dicha intermediación, así como la duración y las condiciones para una potencial renovación.

En los contratos de intermediación inmobiliaria también debe constar si dicho contrato se firma en exclusividad con tal agente o agencia o si, por el contrario, se utilizan diferentes servicios que también deberán verse reflejados.  Así mismo, también resulta esencial que se refleje por escrito el permiso del propietario para hacer fotografías o vídeos de dicho inmueble. 

Un contrato a tener en cuenta incluso una vez finalizada la operación inmobiliaria, ya que la entrega de las llaves de la vivienda objeto de la misma debe reflejarse en este. 

Asesoramiento profesional

Una de las funciones más importantes de un intermediario inmobiliario es la de ofrecer ayuda como un profesional con amplia experiencia en el sector inmobiliario, que lo conoce en profundidad para así evitar cualquier sorpresa desagradable que pueda producirse durante o después de una operación.

Esta experiencia también permite que el propietario se mantenga a salvo de posibles impagos, fraudes o trámites legales mal ejecutados que puedan dar al traste con sus intereses.

Negociación efectiva

Sin duda uno de los motivos principales por los cuales un intermediario inmobiliario resulta una figura imprescindible es para evitar errores cualquiera de las operaciones que lleve a cabo. Su profundo conocimiento de la dinámica y los procesos hacen que sea la persona indicada para que el cliente pueda hacer un negocio satisfactorio. 

Los intermediarios inmobiliarios son, además, unos negociadores muy efectivos, permitiendo así agilizar los procesos con una única cosa en mente, conseguir un trato totalmente satisfactorio para su cliente. 

En resumen, la intermediación inmobiliaria es mucho más que un término desconocido. Representa el pilar fundamental para aquellos que buscan realizar transacciones inmobiliarias de forma exitosa y sin contratiempos. Desde agentes inmobiliarios hasta gestores de propiedades, estos profesionales desempeñan un papel crucial en la facilitación de acuerdos beneficiosos para todas las partes involucradas. Su experiencia, conocimiento del mercado y habilidades de negociación los convierten en aliados indispensables en el complejo mundo de los bienes raíces. Confíar en ellos es garantía de éxito y tranquilidad en cualquier operación inmobiliaria. No dudes en contar con los expertos de GILMAR para obtener la ayuda que necesites, estaremos encantados de colaborar en cada paso del proceso.